Variedad de planta de frambuesa San Rafael

Planta vigorosa tolerante a las enfermedades más comunes, con ramas enjutas.
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Planta de frambuesa en maceta

La variedad de frambuesa San Rafael es un cultivar de frambuesa semiprecoz de origen español, introducido recientemente y muy apreciado por su elevada productividad, su resistencia a las enfermedades y la calidad superior de sus frutos.

El porte de la planta es erecto, con ramas fuertes y bien ramificadas que crecen en altura. Las hojas son de color verde claro, lanceoladas y con márgenes dentados. Su textura es relativamente coriácea, lo que confiere a la planta una buena resistencia a las condiciones climáticas adversas; las ramas son poco espinosas, con buena resistencia a la flexión, lo que permite a la planta soportar el peso del fruto durante la maduración.

Características de los frutos:

  • Color: Los frutos de la variedad San Rafael son de color rojo brillante y buena textura.
  • Forma: Los frutos son de tamaño medio a grande, con forma cónica regular.
  • Sabor: El sabor es dulce, con un equilibrio óptimo entre azúcares y acidez. Es una frambuesa aromática y jugosa, muy apreciada para el consumo en fresco pero también ideal para la elaboración de mermeladas, zumos y postres.
  • Maduración: San Rafael es una variedad de verano, que tiende a madurar a mitad de temporada, con una ventana de cosecha de junio a julio, dependiendo del clima.
  • Resistencia a enfermedades: San Rafael es conocida por su buena resistencia a enfermedades comunes en frambuesas, como la podredumbre del cuello y otras enfermedades fúngicas. Esto la convierte en una opción sólida para los cultivadores de zonas húmedas o lluviosas.

En general, la variedad San Rafael es una excelente elección para quienes buscan una planta de frambuesa resistente y productiva, con frutos de gran calidad, apta tanto para el uso doméstico como para el cultivo comercial.

Cómo plantar frambuesas:

  • Las plantas desmochadas (acortadas en el ápice y sin las ramas laterales) deben plantarse en el suelo entre finales del invierno y principios de la primavera (Figura 1).
  • En verano, se desarrollan las ramitas en las que se producirán las frambuesas; además, brotan del suelo nuevas ramas que crecerán gradualmente para dar fruto al año siguiente (figura 2).
  • Al final del verano, una vez recogidos los frutos, se corta el tallo envejecido que produjo las frambuesas y se deja que se desarrollen las nuevas ramas que han brotado del suelo (figura 3).
  • Hacia el final del invierno, se seleccionan las ramas recién desarrolladas (unas 3-4 por metro lineal, lo que equivale a 2 por planta) y se fijan a soportes verticales.
  • El ciclo de producción vuelve a empezar: las nuevas ramas emiten los brotes laterales que producirán los frutos (figura 4).