MYCO +: Acondicionador vegetal innovador para una salud óptima de las raíces y las hojas de las plantas.

Características:

MYCO + es un acondicionador de plantas no compostado.

MYCO +, en presencia de un pH ligeramente ácido, puede aumentar el crecimiento de hongos extremadamente útiles para las plantas, como los pertenecientes al género Trichoderma (asperellum, atroviride, harzianum, etc.), en concentraciones superiores a 109 u.f.c/g.
La formulación específica también permite el desarrollo de otros microorganismos útiles de la rizosfera, como Clonostachys rosea. Se sabe que estos hongos son capaces de mejorar la calidad del suelo y promover la salud de las plantas mediante diversos mecanismos naturales.

MYCO+ puede estimular el desarrollo de las plantas y degradar los residuos orgánicos del suelo (poder celulosolítico), incluidos los residuos de pesticidas.

Cuando se aplica en medios de cultivo, aumenta su fertilidad y mejora la salud general de las plantas. También promueve el desarrollo de bacterias PGPR

Dosificación:

Dosis para césped: 25-30 g/100 m2, equivalente a 25-30 g/10 litros de agua (aplicación radicular)
Hortalizas: 1,5-3 kg/ha (aplicación foliar y radicular)
Hortalizas de hoja: 2-3 kg/ha (aplicación foliar y radicular)
Horticultura de invernadero: 150-250 g/ha (aplicaciones radiculares)
Fruta de pepita, fruta de hueso y fruta pequeña: 1,5-3 kg/ha (aplicaciones radiculares)

Consejos prácticos de uso:

Las condiciones óptimas para la aplicación de MYCO+ incluyen temperaturas y humedad moderadas, pero puede utilizarse en un rango de 10 a 35°C. (principios de verano, otoño)
Evitar mezclar con productos de pH elevado.
Diluir la cantidad necesaria en una pequeña cantidad de agua, llevar a volumen y mezclar la solución resultante durante unos minutos. El producto es estable y puede conservarse durante dos años si está bien cerrado y protegido, sin refrigeración.
Puede aplicarse a cualquier hora del día.
Para dosis más bajas, se recomiendan 2-3 repeticiones a intervalos aproximados de 10-30 días, dependiendo de los cultivos de que se trate.
También pueden realizarse tratamientos localizados de las raíces con una pértiga inyectora. La frecuencia y el calendario de los tratamientos deben adaptarse a las condiciones climáticas, a la gravedad y a la persistencia de las condiciones que predisponen a las plantas al estrés y a las infecciones fúngicas.